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IKIGAI (Descubre tu propósito)

Hace años estaba muy perdido en la vida.

Tenía 18 años recién cumplidos y no tenía motivación por absolutamente nada.

Estaba a punto de acabar el instituto y no paraba de escuchar a todo el mundo hablar de lo mucho que querían empezar la universidad.

No era mi caso.

No tenía la más mínima idea de que hacer después del instituto, y eso me estaba amargando por completo.

Decidí que esa situación no podía seguir así.

Fuera como fuera tenía que encontrar mi camino, mi pasión, “mi razón de ser”.

Fue así como descubrí mi IKIGAI

¿Qué es IKIGAI?

El IKIGAI es un concepto japones que vendría a significar “Tu razón de vivir”.

Es un término que ha estado ganando bastante popularidad durante los últimos años y uno de los pilares más importantes a la hora de encontrar tu propósito en la vida.

Numerosos psicólogos e investigadores piensan que uno de los factores que hacen de Okinawa una de las regiones con más esperanza de vida es que es uno de los lugares del mundo donde más extendido está el IKIGAI.

IKIGAI

“Ikigai es un concepto japonés que significa “la razón de vivir” o “la razón de ser”. Todo el mundo tiene un Ikigai. Dar con él implica una búsqueda profunda, compleja y extensa. Esta búsqueda es la más importante de tu vida ya que el descubrimiento de tu Ikigai trae la mayor satisfacción y sentido a tu existencia.”

¿Cómo encontrar mi IKIGAI?

Encontrar tu IKIGAI es algo difícil, pero no es imposible.

Yo estuve mucho tiempo investigando y experimentando hasta que lo encontré. Encontré mi razón de ser.

Existen algunas variantes dependiendo de a quien le preguntes pero la mayoría de expertos explican que hay 4 pilares que determinan tu IKIGAI.

1) Encuentra algo que amas hacer

Lo sé, puede parecer obvio, pero te sorprendería la cantidad de personas que se olvidan de este paso.

Lo primero que tienes que hacer para encontrar tu propósito en la vida es encontrar algo que te guste hacer.

No todo lo que te guste hacer será tu IKIGAI, pero es una condición necesaria.

Hay gente que cuando les explico esto me dicen: “Es que Mario, a mi no me gusta hacer nada”.

He conocido a muchísimas personas que se encontraban en esa situación en la que creían que no les gustaba nada. Incluso yo en su momento con también estuve allí.

Bien, lo que le ocurre a estas personas no es que no les guste nada. Es que no lo han descubierto aún.

No pasa nada, es totalmente normal, yo tardé también bastante en darme cuenta.

Lo que tienes que hacer entonces no es encontrar vuestro IKIGAI, en este caso lo principal es que te dediques a investigar, experimentar y probar actividades y disciplinas nuevas. Que te ayuden a encontrar cosas que verdaderamente te gusten.

Cuando ya tengáis claro una buena lista de actividades o disciplinas que os gusten mucho podemos continuar con la búsqueda de IKIGAI.

«Los dos días más importantes de tu vida son el día que naces y el día en que descubres por qué».

— Mark Twain

2) Encuentra algo que se te de bien

El segundo paso una vez has encontrado las cosas que te gustan hacer es ver cuales se te dan bien hacer.

Ya te puede gustar mucho cantar, que si tienes la peor voz del mundo no podrás ser feliz dedicándote a ello.

Por mucho que nos guste una disciplina en concreto terminaríamos frustrándonos y abandonándola.

Sin embargo, cuando somos buenos en algo y además nos gusta, la motivación que conseguimos no se puede describir.

Podríamos estar horas y horas dedicándonos a ello y el tiempo pasaría volando.

3) Encuentra algo que te permita vivir de ello

Ya tenemos algo que nos gusta y que además se nos da bien.

Ahora lo que necesitamos es poder vivir de ello.

Y bien, ¿cómo sé si puedo vivir o no de algo?

Pues eso lo tienes que analizar tú.

Por un lado están ciertas profesiones más tradicionales, que por lo general no tienen mucha complicación.

Por ejemplo si tu IKIGAI es ser médico el camino para llegar hasta allí está muy bien determinado: hacer el instituto, luego la carrera de medicina, hacer el MIR…

Pero luego está la otra cara de la moneda, disciplinas que o bien son más nuevas y el camino no está muy claro o bien disciplinas que son conocidas por su complicación para ganarse la vida con ellas: artistas, bloggers, montar tu propia empresa…

Que sean disciplinas más complicadas no quiere decir ni muchísimo menos que no se pueda ganar la vida con ellas.

Si bien hace tiempo era prácticamente imposible ganarse la vida con ciertos trabajos, hoy en día gracias a Internet encuentras a muchas personas que han conseguido vivir de sus gran pasión.

Analiza tu situación y piensa de todas las cosas que te gustan y que se te dan bien cuales te pueden permitir vivir de ello.

4) Encuentra algo que ayude al mundo (TU mundo)

Por último, uno de los pilares más representativos del IKIGAI es que tiene que ser algo que ayude al mundo, tu mundo.

Y no me malinterpretéis, todo el mundo, independientemente del trabajo al que se dedique, puede ayudar al mundo.

El carpintero que arregla los objetos de sus clientes está ayudando al mundo.

El granjero que ordeña las vacas para que el resto del pueblo tenga leche también está ayudando al mundo.

Y el panadero que madruga para que sus vecinos tengan el pan recién horneado también está ayudando al mundo.

La cuestión es sentir que tu labor ayuda a los demás y sentirse agradecido por ello.

Esa es tu razón de vivir

Si consigues encontrar algo que te apasione, que se te de bien, que puedas vivir de ello y donde sientas que estas ayudando al mundo, entonces habrás conseguido encontrar tu IKIGAI.

Puede ser un proceso largo y complejo, pero si hay algo que tengo claro es que el día en el que empecé a buscar mi IKIGAI cambió mi vida.

Todo el mundo se merece encontrar su razón de vivir.

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